Por primera vez en la historia de las relaciones diplomáticas entre la República Dominicana y la Repúblique D’Haití, hemos leído con claridad un pronunciamiento sobre la responsabilidad que debe tener el gobierno del país vecino sobre sus propios ciudadanos.

El sábado pasado (Mayo 8, 2021), el candidato presidencial Maxo Joseph estableció con precisión que “la República Dominicana no debe cargar con los problemas que afectan a Haití”.De acuerdo con estas palabras, Maxo Joseph reconoció que los problemas del pueblo haitiano son de entera responsabilidad del gobierno de su país y a sus mandatarios compete resolverlos.Sin embargo, ante la tragedia que se vive en el país vecino, reconoció que “la comunidad internacional debe aunar esfuerzos para ayudar a solucionar la situación que atraviesa Haití para así poder celebrar elecciones seguras y confiables” que aseguren el comienzo de una era de cambio en esa nación.

Debe quedarles claro a los nuevos gobernantes dominicanos y a las ONGs que promueven la fusión de la isla que las palabras de Maxo Joseph se dirigen a lograr la independencia social, política y económica de Haití y deje de ser carga para la República Dominicana.

Eso da a demostrar que no todos los líderes políticos del vecino paísno piensan igual implica crear en Haití una corriente nueva de pensamiento que descargue a la RD de una responsabilidad que no le pertenece en cuanto a su propio destino histórico.

Históricamente los dominicanos hemos sido solidarios con el pueblo haitiano y hemos acudido en su ayuda cuantas veces ha sido necesario. Pero no podemos cargar con todos sus problemas porque tenemos que solucionar nuestra propia problemática interna.

Los dominicanos estamos dispuestos a socorrer a Haití como lo hicimos a raíz del terremoto del 2010, pero esa ayuda debe ser en su propio territorio, como viene expresando la mayoría de nuestro pueblo.

El gobierno de Abinader está en la responsabilidad de informar al pueblo dominicano sobre los planes que se vienen realizando casi de manera oculta para cedular a “supuestos estudiantes” haitianos que vienen a “estudiar” a nuestro país.

Debe informar de las reuniones secretas con funcionarios gubernamentales de Haití sobre lo que se hará con las aguas del Río Masacre a raíz de conocerse la construcción de un canal de riego en ese cauce fronterizo.

Los dominicanos estamos en el deber de ser informados sobre cualquier negociación bilateral que afecte el interés de toda la nación.Ojalá Maxo Joseph pueda ser la mejor opción electoral del pueblo haitiano y que gane las elecciones presidenciales de su país para cambiar las reglas de juego en las relaciones binacionales.

Que su triunfo contribuya a definir que las ayudas de las ONGs que operan en la RD para sean ejecutadas en el territorio de Haití. Quizás su triunfo contribuya a la repatriación voluntaria antes de que el próximo gobierno de la RD, que surgirá en las elecciones del 2024, se vea obligado a aplicar las leyes migratorias existentes para acabar de una vez y para siempre con la invasión pacífica que amenaza a la RD.